La delegación de VOX en el Parlamento Europeo, junto con eurodiputados del grupo Patriots, ha solicitado explicaciones a la Comisión Europea sobre la reciente decisión de levantar las sanciones impuestas a Venezuela. Este levantamiento, realizado en mayo de 2024, ha sido interpretado por VOX como un respaldo implícito al régimen autoritario de Nicolás Maduro.
Las sanciones europeas, que se implementaron en noviembre de 2017, incluían un embargo de armas, restricciones a equipos utilizados para la represión interna y sanciones económicas contra figuras clave del gobierno venezolano. Estas medidas fueron una respuesta a la creciente violación de los derechos humanos y el debilitamiento democrático bajo el gobierno de Maduro.
El 13 de mayo de 2024, la UE decidió levantar temporalmente las sanciones contra el jefe del Consejo Nacional Electoral (CNE) de Venezuela y tres exfuncionarios, tras una propuesta del gobierno español respaldada por Josep Borrell, Alto Representante de la UE para Asuntos Exteriores y Política de Seguridad. VOX y sus aliados en el Parlamento Europeo ven esta decisión como un intento de suavizar la postura de la UE hacia un régimen que sigue cometiendo abusos graves contra los derechos humanos.
Jorge Martín Frías y Hermann Tertsch de VOX, junto con Kinga Gál del grupo Patriots y António Tânger Corrêa de la delegación portuguesa de Patriots, han liderado una campaña para obtener claridad sobre esta decisión. Han presentado una pregunta formal a la Comisión Europea en la que cuestionan las razones detrás del levantamiento de sanciones, afirmando que el apoyo de Borrell y el gobierno español a este régimen podría estar facilitando la continuidad de la represión en Venezuela.
La decisión de la UE llega en un contexto complicado: el 28 de julio de 2024, el régimen de Maduro llevó a cabo unas elecciones presidenciales ampliamente criticadas por fraude y manipulación. Maduro se proclamó vencedor en un proceso marcado por irregularidades evidentes. La suavización de las sanciones por parte de la UE es vista por VOX como una aceptación tácita de los resultados de estas elecciones ilegítimas.
VOX ha criticado duramente la postura de la UE, argumentando que debería ser un bastión de la democracia y los derechos humanos, no un facilitador de dictaduras. La decisión de levantar las sanciones fue recibida con indignación por los defensores de la libertad en Venezuela, quienes ven en ella una falta de compromiso de la UE con los valores democráticos.
La delegación de VOX continúa demandando respuestas y ha solicitado una revisión exhaustiva de la política de la UE hacia Venezuela. También han pedido que se revisen las relaciones de la UE con el régimen de Maduro. Además, de que se tomen medidas más firmes para sancionar las violaciones de derechos humanos en el país sudamericano.
