El PP denuncia a Marlaska por encubrir una trama de corrupción que vincula a Sánchez
En una intensa sesión de la Comisión de Investigación del caso Koldo, el portavoz del Grupo Parlamentario Popular, Luis Santamaría, arremetió contra el ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska, acusándolo de mentir y de encubrir una trama de corrupción que, según él, «empieza y termina en el número uno», refiriéndose al presidente Pedro Sánchez.
«La trama está irradiada hasta la médula, y el ministro no se atreve ni quiere contestar. No asume ninguna responsabilidad», declaró Santamaría, reiterando el apoyo del PP a los funcionarios de la Guardia Civil y de la UCO, quienes, según él, enfrentan presiones para ocultar la verdad, que estaría en el centro de la operación relacionada con Sánchez y varios ministerios.
Santamaría también criticó al ministro por su reciente afirmación de que Delcy Rodríguez no había pisado territorio Schengen, recordando una sentencia del Tribunal Supremo que establece que el simple sobrevuelo de territorio español implica una vulneración de las normas de la UE. «¿Si no es territorio Schengen la terminal de Barajas, qué es?», se preguntó irónicamente.
El senador del PP acusó a Marlaska de no remitir a la Comisión los documentos solicitados sobre la presencia de Rodríguez en el aeropuerto de Barajas durante la noche del 20 al 21 de enero de 2020. Aseguró que el ministro debe asumir su responsabilidad política, ya que, según la UCO, se ha infiltrado una red delictiva en el Ministerio que trabaja en temas de corrupción.
Santamaría destacó que Aldama, vinculado a esta red, estaba dado de alta en las bases de datos de la Guardia Civil, lo que consideró «inédito», señalando que la Guardia Civil había proporcionado móviles seguros para cometer delitos a cambio de dinero.
En relación con la trama de las mascarillas, el senador criticó las declaraciones de Marlaska, quien había afirmado que todo había sido correcto. Santamaría presentó un correo electrónico de un subdirector general que indicaba haber cerrado el precio de las mascarillas con Koldo, lo que consideró «absolutamente irregular» y una clara prevaricación.
El dirigente popular concluyó subrayando que la empresaria beneficiaria de un contrato de 3,9 millones de euros es la misma que pagó el chalet del exministro Ábalos en Sotogrande. Además, expresó su preocupación por las posibles presiones a la UCO para que no investigara el contenido de los pendrives de Ábalos, sugiriendo que podrían contener información que vinculara al presidente del Gobierno con la trama.