La Guardia Civil, en una operación conjunta con la Policía Nacional, ha detenido a tres integrantes de una organización criminal altamente especializada en el robo a superficies comerciales, almacenes y naves industriales en la Comunidad de Madrid y Toledo. En su último golpe, el grupo sustrajo mercancía valorada en 90.000 euros, parte de la cual fue recuperada en registros domiciliarios tras las detenciones.
La investigación se inició a raíz de la denominada «Operación Arsi», efectuada en mayo de este año, en la que se desmanteló un grupo asentado en Madrid y Seseña (Toledo). En aquel operativo se detuvo a 11 personas y se realizaron seis registros domiciliarios. Sin embargo, dos de los detenidos en aquella ocasión mantuvieron su actividad delictiva, sumando a sus filas a un nuevo cómplice y formando así un nuevo grupo criminal, al que se le atribuyen 23 robos con fuerza y delitos contra la propiedad.
Alta especialización en desactivación de alarmas y técnicas de robo
El grupo criminal era experto en el manejo de inhibidores de frecuencia y en técnicas avanzadas para la desactivación de alarmas, el forzamiento de puertas y la creación de butrones, lo que les permitía acceder con rapidez y eficacia a grandes botines. Su objetivo principal eran almacenes y superficies comerciales, generando importantes pérdidas económicas a empresas, transportistas y pequeños comerciantes.
Uso de vehículos de alta gama y quema de pruebas
Además de los robos, los detenidos robaban vehículos de alta gama para vigilar y cometer los asaltos. Los agentes también constataron que, tras peligrosas persecuciones, el grupo criminal calcinaba estos vehículos para eliminar pruebas. En el mes de septiembre, el operativo concluyó con la detención de los tres sospechosos, decretándose el ingreso en prisión de dos de ellos. Las autoridades estiman que el valor de lo robado supera el medio millón de euros.