Desarticulan red de ciberdelincuencia que estafó más de 100.000 euros mediante estafas telefónicas en Zaragoza
La Guardia Civil, en el marco de la operación “Ochocientos setenta”, ha desmantelado una organización criminal asentada en Zaragoza. Esta se dedicaba a cometer estafas telefónicas mediante métodos de “phishing”, “vishing” y “smishing”. En total, seis personas han sido detenidas y otras cinco han sido investigadas como colaboradoras necesarias.
La investigación, que comenzó en mayo de 2024, se inició tras detectarse una serie de denuncias relacionadas con un fraude dirigido a clientes de una entidad bancaria. En estas estafas, los delincuentes empleaban un sistema organizado y sofisticado que incluía el envío de mensajes SMS fraudulentos para obtener los datos bancarios de las víctimas y, posteriormente, realizar transacciones ilegales o transferencias económicas.
Los agentes lograron identificar a los integrantes de esta red delictiva, que contaba con una estructura piramidal y una clara distribución de roles. Tras meses de trabajo, en diciembre de 2024, se llevaron a cabo cuatro registros domiciliarios en Zaragoza y en el barrio de La Cartuja Baja. Durante los registros, se incautaron numerosos dispositivos electrónicos empleados en las estafas, teléfonos móviles de alta gama, sustancias estupefacientes, armas ilegales y joyas adquiridas con el dinero sustraído.
Una operación con importantes hallazgos
En total, la organización logró estafar más de 100.000 euros y afectar a 53 víctimas, la mayoría de ellas en la provincia de Zaragoza (51), mientras que otras dos se localizaron en Huesca. Cuatro de los detenidos fueron enviados al Centro Penitenciario de Zuera tras pasar a disposición judicial.
Además, uno de los miembros de la red enfrentará cargos adicionales por delitos relacionados con el tráfico de drogas, ya que se descubrió que las sustancias incautadas estaban destinadas a introducirse en centros penitenciarios.
Modus operandi detallado
El fraude comenzaba con el envío de un SMS que simulaba ser de una entidad bancaria, alertando al cliente sobre un cargo no reconocido de 870 euros. Al acceder al enlace incluido en el mensaje, las víctimas eran dirigidas a una página web falsa donde se solicitaban sus credenciales de banca online.
Tras obtener esta información, los delincuentes realizaban una llamada telefónica que parecía provenir del número oficial del banco, gracias a técnicas de suplantación de identidad. Durante esta llamada, el estafador obtenía códigos de verificación y otros datos necesarios para realizar compras y transferencias fraudulentas.
El dinero sustraído se utilizaba para adquirir productos tecnológicos, realizar extracciones en cajeros automáticos o transferir fondos a cuentas virtuales gestionadas por “mulas económicas” de la organización.
Colaboración entre unidades de la Guardia Civil
La operación, liderada por el Equipo de Investigación Tecnológica de la Unidad Orgánica de Policía Judicial y el Equipo@ de la Guardia Civil de Zaragoza, contó con el apoyo de las Unidades de Seguridad Ciudadana de Zaragoza, Huesca y Teruel.