- Tres personas fueron detenidas in fraganti cuando descargaban la droga y un cuarto fue arrestado posteriormente
- La droga intervenida estaba dispuesta en 126 fardos, de los cuales 74 fueron localizados en la furgoneta que empleaban para alojar la carga, mientras que los otros 52 se encontraban en la embarcación
Agentes de la Guardia Civil, en una operación conjunta con la Policía Nacional, han intervenido casi 5.000 kilogramos de hachís dispuestos en un total de 126 fardos justo cuando estaban siendo descargados en el puerto alicantino de Santa Pola. Cuatro personas han sido detenidas por su presunta implicación, de las cuales tres de ellas fueron arrestadas in fraganti.
La investigación se inició gracias al intercambio constante de información en la lucha contra el narcotráfico, fruto del cual se tuvo conocimiento de la posible llegada a las costas alicantinas de una embarcación con gran cantidad de hachís procedente del continente africano.
Dispositivo conjunto en el Puerto de Santa Pola
La información recibida vino a confirmarse cuando los agentes avistaron una embarcación tipo “GO FAST” con cuatro motores navegando a una velocidad de 52 nudos y que se encontraba aparentemente cargada de fardos, lo que motivó el establecimiento de un dispositivo de vigilancia conjunto entre Guardia Civil y Policía Nacional en la zona del puerto deportivo de Santa Pola al objeto de cubrir todos los accesos para detectar posibles movimientos de descarga de droga.
Mientras los agentes se encontraban en la zona, observaron una furgoneta con las puertas traseras abiertas y aculada a una embarcación de recreo, donde diversas personas realizaban labores de descarga del barco y carga en la furgoneta. Cuando los agentes se aproximaron, todos ellos trataron de emprender la huida, siendo detenidos tres de ellos. Uno de los detenidos reveló la existencia de una segunda furgoneta preparada para cargar el resto de la droga, por lo que los agentes proceden a su incautación.
En la parte trasera de la furgoneta que empleaban para descargar la droga se localizó un total de 74 fardos de hachís de unos 38 kilogramos cada uno. En ese mismo vehículo los agentes hallaron también una bandolera con documentación de una cuarta persona que fue identificada como uno de los que emprendieron la huida. Al día siguiente, este cuarto individuo se personó en la comandancia de la Guardia Civil de una localidad castellonense, procediendo los agentes a su detención por un presunto delito contra la salud pública.
Embarcación de lujo
En relación con el barco del que se estaban descargando los fardos de hachís, se trata de una embarcación recreativa tipo yate de bandera británica que permaneció custodiada hasta la correspondiente autorización de entrada y registro. Los agentes procedieron a intervenir en su interior un total de 52 fardos (dos en la cubierta, tres en la parte inferior y 47 en las habitaciones), cuatro teléfonos móviles de alta gama, un teléfono satelital, dos juegos de llaves y documentación variada.