El Ministerio de Consumo llevará a cabo una investigación conjunta con autoridades autonómicas y europeas para analizar las publicaciones de influencers y creadores de contenido. El objetivo es determinar si estas publicaciones cumplen con la legislación de la Unión Europea (UE) referente a prácticas comerciales desleales y, de este modo, prevenir la publicidad engañosa.
Esta acción se desarrollará en varios países del Espacio Económico Europeo y estará bajo la coordinación de la Oficina de Enlace Única de la red de Cooperación para la Protección del Consumidor (CPC), perteneciente a la Dirección General de Consumo. Además, contará con la colaboración de las autoridades competentes de diversas comunidades autónomas.
En las próximas semanas, la Comisión Europea (CE) y las autoridades nacionales de la red de CPC llevarán a cabo un rastreo en línea para analizar las publicaciones de influencers y creadores de contenido. El propósito es verificar si se ajustan a las obligaciones legales establecidas en las directivas europeas relacionadas con prácticas comerciales desleales y comercio electrónico.
El objetivo de estas acciones es garantizar que el comercio en línea sea tan seguro y cumpla con las mismas normativas que el comercio tradicional. La legalidad de la publicidad en redes sociales es una prioridad compartida por las autoridades europeas en cuanto a la protección al consumidor.
Simultáneamente, la CE ha presentado el Influencer Legal Hub, un espacio que proporciona información crucial sobre la legislación europea en el ámbito de la protección al consumidor. A través de recursos como vídeos animados y materiales desarrollados por expertos académicos, los influencers podrán conocer sus obligaciones legales, especialmente en lo que respecta a cuándo, dónde y cómo deben divulgar sus mensajes publicitarios en las redes sociales. Además, se informa a los consumidores sobre sus derechos al adquirir productos o servicios.
Con esta acción coordinada a nivel europeo, el Ministerio de Consumo fortalece la protección de los consumidores frente a la publicidad en redes sociales, con un enfoque especial en la población más vulnerable, como los menores.