La Guardia Civil de Pontevedra ha abierto una investigación contra un conductor por un delito contra la seguridad vial, después de que fuera interceptado circulando a una velocidad de 182 km/h en un tramo limitado a 90 km/h en la carretera VG-4.1, a la altura de Sanxenxo. El incidente ocurrió el pasado sábado, 2 de noviembre, cuando un radar del Destacamento de Tráfico de Pontevedra detectó el exceso de velocidad.
Tras ser registrado el incumplimiento, una patrulla ubicada en las inmediaciones procedió a detener e identificar al conductor, un hombre de 40 años y vecino de la zona. La Guardia Civil indicó que, debido a la magnitud de la infracción, se le ha investigado como presunto autor de un delito de peligro para la seguridad vial. Según la normativa vigente, exceder en más de 80 km/h el límite establecido en vías interurbanas implica un delito sancionable con penas que pueden incluir prisión de hasta seis meses, multas de hasta doce meses o trabajos en beneficio de la comunidad de hasta noventa días.
Además de estas posibles sanciones, el conductor podría enfrentarse a la pérdida del derecho a conducir vehículos a motor y ciclomotores por un período que oscila entre uno y cuatro años, según determine la Autoridad Judicial.
Las autoridades recalcan que la velocidad excesiva es uno de los factores de riesgo más comunes en accidentes viales, poniendo en peligro tanto a los conductores como a los demás usuarios de la vía. Este caso subraya el enfoque de la Guardia Civil en la seguridad vial y el cumplimiento de las normas de tránsito para prevenir riesgos graves en las carreteras.