En el marco de la operación «Pepperanda», la Guardia Civil ha logrado desmantelar un peligroso grupo criminal dedicado al robo con violencia e intimidación en establecimientos de hostelería de La Rioja. La operación ha resultado en la detención de nueve personas, quienes enfrentan cargos por pertenencia a grupo criminal, robo con violencia e intimidación, hurto, estafa, delitos contra la seguridad vial y atentado contra agentes de la autoridad.
El caso más grave tuvo lugar en Haro, donde tres asaltantes, con el rostro cubierto y armados con una pistola, irrumpieron en un bar, encañonaron al camarero, lo tiraron al suelo y lo rociaron con un spray de defensa personal. Mientras la víctima quedaba incapacitada, los delincuentes sustraían dinero y objetos de valor antes de huir.
Los agentes identificaron patrones de actuación similares en otros robos ocurridos en 37 localidades riojanas, como Ábalos, Agoncillo, Alesanco, Alcanadre, Alfaro, Santo Domingo de la Calzada y Nájera, entre otras. El grupo criminal operaba mayormente de madrugada, ejecutando asaltos violentos en bares y restaurantes, previamente seleccionados tras un análisis minucioso de las zonas y sus posibles vías de escape.
Modus operandi y expansión delictiva
Los criminales tenían su base de operaciones en Miranda de Ebro (Burgos) y utilizaban herramientas contundentes como picos, cizallas y mazas para forzar verjas, puertas y cajas registradoras. También atacaban máquinas recreativas y sustraían dinero en efectivo.
Para desplazarse, robaban vehículos que luego empleaban en sus fugas, circulando a gran velocidad y en ocasiones en sentido contrario, poniendo en riesgo la seguridad vial. Asimismo, en ocasiones actuaban a plena luz del día, distrayendo al personal de los establecimientos para sustraer tarjetas de crédito y objetos personales utilizados posteriormente en compras fraudulentas.
Un historial delictivo extenso
En total, la banda está relacionada con 46 delitos, incluyendo:
- 37 robos con fuerza en establecimientos de hostelería.
- 4 robos de vehículos.
- 1 delito de estafa.
- 2 delitos contra la seguridad vial.
- 1 atentado contra agentes de la autoridad.
Los daños materiales ocasionados en verjas, puertas, mobiliario y cajas registradoras, junto con el valor de los objetos y dinero sustraído, ascienden a más de 112.000 euros.
Esta operación ha sido llevada a cabo por el Grupo de Investigación y Apoyo de la Guardia Civil en Haro, marcando un golpe decisivo contra la delincuencia organizada en La Rioja.