Desmantelado un clan familiar que lideraba la logística del narcotráfico en Cádiz
En una operación conjunta entre la Guardia Civil, la Policía Nacional y la Agencia Tributaria, se ha logrado desmantelar una organización criminal dedicada a la logística del narcotráfico en la provincia de Cádiz. La red, liderada por un conocido clan familiar asentado en Chiclana de la Frontera, operaba también en San Fernando, Puerto de Santa María y Puerto Real, proporcionando recursos clave como combustible, víveres y embarcaciones de alta velocidad para las narcolanchas.
La operación, denominada «Navegante», culminó con la detención de 15 personas y la realización de siete registros domiciliarios, en los que se incautaron una embarcación neumática, tres motores, 21.580 euros en efectivo, cinco armas de fuego, una granada de humo militar, dos rotativos policiales, siete kilos de marihuana, 18 pastillas de hachís, 2.475 litros de gasolina en petacas, entre otros materiales.
Según las investigaciones, la organización estaba altamente estructurada, con un escalafón jerárquico liderado por dos hermanos que se encargaban de la financiación y control de las operaciones. Estos líderes coordinaban la compra de gasolina, la adquisición de embarcaciones y víveres, y la seguridad de las operaciones, mientras que un lugarteniente asumía el papel de intermediario con el resto de los miembros de menor rango.
Además de abastecer a las embarcaciones de alta velocidad, la red ofrecía apoyo logístico a otras mafias del narcotráfico en pleno mar, proporcionando combustible y cambios de tripulación. Este esquema permitía realizar trueques de gasolina por fardos de hachís, asegurando así el flujo constante de droga entre Marruecos y España.
Peligro para la población
Las «guarderías» de combustible, donde se almacenaban las petacas de gasolina, se encontraban distribuidas tanto en áreas urbanas como rurales, incluso en viviendas familiares cercanas a dormitorios infantiles. Estas prácticas representaban un grave riesgo de explosión, que ponía en peligro a las familias residentes y a los transportistas que movilizaban estos materiales inflamables en vehículos sin las mínimas medidas de seguridad.
La presión policial obligó a la red a modificar constantemente las ubicaciones de los almacenes, lo que no fue suficiente para eludir la acción coordinada de las fuerzas de seguridad.
Contexto y repercusiones
Con un historial delictivo extenso por delitos relacionados con el narcotráfico, los miembros de esta red actuaban como piezas clave en la logística de los alijos provenientes del norte de África. La operación «Navegante» supone un duro golpe a las estructuras que sostienen el tráfico de drogas en la región, afectando directamente la capacidad de suministro de las organizaciones criminales que operan en el estrecho de Gibraltar.
Las investigaciones continúan abiertas, y no se descartan más detenciones en los próximos días.
