Agentes de la Policía Nacional han desarticulado una red criminal especializada en el tráfico de hachís desde Marruecos hacia España utilizando aeronaves no tripuladas, conocidas como «narcodrones». La operación ha culminado con la detención de diez personas –siete de las cuales han ingresado en prisión– y la realización de seis registros en domicilios de Algeciras y Marbella. Esta investigación ha contado con el apoyo de EUROPOL y la colaboración de las fuerzas policiales de Ucrania y Polonia.
Aeronaves con tecnología avanzada para el tráfico de drogas
La organización, que operaba en el Campo de Gibraltar y la Costa del Sol, fabricaba drones de grandes dimensiones en Ucrania, diseñados especialmente para transportar hasta diez kilogramos de hachís por vuelo. Estas aeronaves, con una autonomía de más de 50 kilómetros, cruzaban el Estrecho de Gibraltar sin necesidad de aterrizar, dejando la droga en puntos predefinidos antes de regresar a su lugar de origen.
La fabricación y el traslado de estos drones se realizaban por carretera desde Ucrania hasta el sur de España. En este proceso participaban operadores provenientes de países del este de Europa, quienes ofrecían sus servicios a organizaciones criminales locales asentadas en el Campo de Gibraltar y la Costa del Sol. Las investigaciones revelaron que esta red habría intentado introducir hasta mil kilogramos de hachís utilizando esta sofisticada técnica.
Resultados de la operación policial
Durante la operación, los agentes de la Policía Nacional llevaron a cabo seis registros domiciliarios en Algeciras y Marbella, incautando tres aeronaves –una de ellas en fase de construcción–, dispositivos de control remoto, herramientas de reparación, así como una cantidad significativa de dinero en efectivo y estupefacientes. Estas drogas habían sido introducidas previamente en España mediante los drones desarticulados.
Los detenidos han sido puestos a disposición del Juzgado de Instrucción n.º 5 de Algeciras, que ha ordenado el ingreso en prisión de siete de los implicados. Esta actuación representa un golpe significativo contra el tráfico de drogas en una de las zonas más afectadas por este fenómeno en el país.
Colaboración internacional clave para el éxito
La desarticulación de esta red ha sido posible gracias a la colaboración entre la Policía Nacional, EUROPOL y las fuerzas policiales de Ucrania y Polonia. Esta cooperación internacional permitió rastrear el origen de los drones y a los responsables de su fabricación, traslado y operación.
Con esta actuación, la Policía Nacional refuerza su compromiso en la lucha contra las nuevas modalidades de tráfico de drogas, que recurren cada vez más a tecnologías avanzadas como los drones para evadir controles policiales.
