La Guardia Civil de Málaga ha investigado a un conductor que circulaba a 300 km/h en un tramo limitado a 100 km/h de la Autovía del Mediterráneo (A-7). Los hechos ocurrieron en horario nocturno, en un tramo sin iluminación, y fueron grabados y difundidos en redes sociales, donde se hizo viral rápidamente.
El vídeo mostraba al conductor realizando maniobras temerarias y adelantamientos por la derecha, lo que llevó a la Unidad de Investigación de Siniestros Viales de la Guardia Civil de Tráfico de Málaga a abrir una investigación. Tras varios meses de análisis del contenido audiovisual, los agentes lograron identificar el vehículo y a su propietario, un joven de 20 años que se encontraba al volante en el momento de los hechos.
Intento de ocultar pruebas
Dos días después de que el vídeo se hiciera viral, el investigado transfirió el vehículo a un tercero y eliminó todo el contenido que había subido a sus redes sociales, en un intento de evitar su vinculación con el delito.
A este joven se le investiga por un delito contra la seguridad vial, que podría acarrear graves sanciones, incluyendo penas de prisión y la retirada del permiso de conducir.
Colaboración policial y consecuencias legales
La investigación ha sido llevada a cabo por la Guardia Civil de Tráfico de Málaga, en colaboración con la Policía Local. Las diligencias han sido remitidas a la Fiscalía Provincial de Málaga (Seguridad Vial) para determinar la responsabilidad penal del conductor.
Desde la Guardia Civil recuerdan que este tipo de conductas ponen en riesgo no solo la vida del conductor, sino también la del resto de usuarios de la vía. Además, advierten sobre la creciente tendencia de difundir conductas ilegales al volante en redes sociales, lo que facilita la identificación y persecución de estos delitos.
