En una reciente reunión del Consejo de Ministros, el gobierno español ha establecido los límites de gasto no financiero para 2025 y ha mejorado sus proyecciones de crecimiento económico, consolidando así su compromiso con la estabilidad presupuestaria y el fortalecimiento del Estado de bienestar. La vicepresidenta primera y ministra de Hacienda, María Jesús Montero, destacó la importancia de estos pasos como fundamentales para la elaboración de los Presupuestos Generales del Estado para 2025, que se espera sean aprobados antes del fin de año.
El límite de gasto no financiero nacional para 2025 ha sido fijado en 195.353 millones de euros, representando un incremento del 3.2% respecto a 2024. Este aumento de 6.138 millones refleja una política de gasto cuidadosa pero expansiva, destinada a mejorar los servicios públicos fundamentales como la sanidad, la educación, las pensiones y la dependencia. Incluyendo los fondos europeos, el techo de gasto se sitúa en 199.171 millones de euros.
El aumento en el techo de gasto está diseñado para compensar una reducción en las transferencias directas de los fondos europeos, con el objetivo de seguir utilizando estos fondos como una herramienta clave para la transformación del modelo productivo de España, especialmente en áreas como la digitalización y la transición verde.
Montero también anunció que el Estado transferirá 22.881 millones de euros a la Seguridad Social en 2025, un aumento del 7% respecto al año anterior, en línea con las recomendaciones del Pacto de Toledo para garantizar la sostenibilidad del sistema de pensiones español.
Además, se han establecido nuevas sendas de déficit y deuda pública para el periodo 2025-2027. El gobierno se ha propuesto reducir el déficit público a 2.5% en 2025, a 2.1% en 2026 y a 1.8% en 2027. Las comunidades autónomas recibirán un mayor margen fiscal, permitiendo un déficit de -0.1% del PIB en esos años, mientras que la administración central reducirá su propio déficit de forma progresiva.
El ministro de Economía, Comercio y Empresa, Carlos Cuerpo, complementó la presentación de Montero con un informe sobre la situación económica del país, destacando que la economía española se espera que crezca un 2.4% en 2024. Esta revisión al alza de la previsión del Producto Interior Bruto (PIB) es testimonio del dinamismo de los indicadores económicos españoles, especialmente en términos de empleo.
Estas medidas reafirman el compromiso del gobierno con una política fiscal responsable que busca no solo cumplir con las expectativas de crecimiento económico y empleo, sino también mejorar la calidad de vida de sus ciudadanos a través de un enfoque equilibrado y sostenible en la gestión de los recursos públicos.
