El sistema de Seguridad Social logra un superávit de 3.101 millones con un aumento del 7,5% en cotizaciones

Los ingresos por cotizaciones sociales crecen un 33,3% respecto a niveles prepandemia, alcanzando los 95.660 millones de euros en los primeros siete meses de 2024.

El sistema de Seguridad Social logra un superávit de 3.101 millones con un aumento del 7,5% en cotizaciones

Los ingresos por cotizaciones a la Seguridad Social han experimentado un crecimiento interanual del 7,5% en los primeros siete meses de 2024, alcanzando los 95.660 millones de euros. Este incremento, que representa 6.661 millones de euros más que en el mismo periodo de 2023, refleja la solidez del sistema, especialmente tras la implementación del Mecanismo de Equidad Intergeneracional, que generó 2.122 millones de euros, un 45% más interanual.

Comparado con 2019, el último año antes de la pandemia, las cotizaciones han crecido un 33,3%, lo que supone un aumento de 23.915 millones de euros. Este repunte se debe principalmente al incremento del 7,8% en las cotizaciones de ocupados, que han alcanzado los 90.242 millones de euros. Las cotizaciones de desempleados también subieron un 2,2%, llegando a los 5.418 millones de euros.

El saldo positivo del sistema de Seguridad Social a 31 de julio de 2024 se sitúa en 3.101 millones de euros, lo que equivale al 0,2% del PIB. Este resultado es producto de unos derechos reconocidos por operaciones no financieras de 130.577 millones de euros (con un incremento del 5,9%), frente a unas obligaciones reconocidas de 127.476 millones de euros (7,5% más).

En términos de caja, la recaudación líquida del sistema ha alcanzado los 127.861 millones de euros, con un incremento del 7,4%, mientras que los pagos han crecido un 7,6%, llegando a 127.270 millones de euros.

Por el lado del gasto, las prestaciones económicas a familias e instituciones han representado 119.854 millones de euros, lo que supone un 8,2% más que en 2023. De este monto, 110.017 millones corresponden a pensiones y prestaciones contributivas, con un crecimiento del 8,1% impulsado por el aumento del número de pensionistas, la revalorización de pensiones y la subida de la pensión media.

El gasto en incapacidad temporal ha crecido un 17,8%, mientras que las prestaciones por nacimiento y cuidado de menor y otras prestaciones relacionadas con la salud familiar han aumentado un 7,7%. Las pensiones no contributivas y los complementos por mínimos han subido un 9,6%, destacando el crecimiento del Ingreso Mínimo Vital, que aumentó un 10,9%.

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