La demanda ha sido de 40.670 millones de euros, un volumen más de ocho veces superior al emitido, que evidencia el buen acceso del Tesoro a los mercados de capitales, en un contexto marcado por la normalización de la política monetaria y la reciente subida de tipos del Banco Central Europeo, que han ocasionado notables incrementos en las rentabilidades de la deuda soberana en la zona euro.
En estas circunstancias, destacan la calidad y profundidad de la base inversora de la emisión, con una participación de inversores no residentes del 88%. De este porcentaje, destacan Francia e Italia con un 21,3%, el Reino Unido e Irlanda con un 20,5%, Alemania, Austria y Suiza, con un 13,7% y los países escandinavos con un 8,8%. El resto de los inversores europeos han representado el 14,6% de la asignación. Por su parte, Oriente Medio ha participado en un 4,0% de la transacción y Estados Unidos y Canadá en un 3,8%, mientras que Asia ha participado en un 0,7%. Otros inversores han obtenido un 0,9% de la emisión.
La demanda ha estado repartida entre 288 cuentas inversoras, muy diversificadas tanto desde el punto de vista geográfico como por tipología de inversor. Atendiendo al tipo de inversor, la mayor participación ha correspondido a las gestoras de fondos con un 37,1%, seguidas de las aseguradoras y fondos de pensiones, con un 17,5%, las tesorerías bancarias, con un 17,2%, y los bancos centrales e instituciones oficiales con un 8,9%. El resto de las empresas de servicios bancarios han participado con un 9,8%, los fondos apalancados con un 6,1%, y otros inversores han representado un 3,4%.
El bono emitido hoy vence el 30 de julio de 2043 y tiene un cupón del 3,45%. La rentabilidad se ha situado en el 3,499%. Con esta sindicación de 5.000 millones de euros, el Tesoro ha completado ya el 82% de su programa de financiación a medio y largo plazo.
El coste de la emisión total en lo que de año asciende a 1,06%, por debajo del coste medio del conjunto de la cartera de valores del Tesoro. Asimismo, el trabajo realizado por el Tesoro en los últimos años aprovechando los bajos costes de financiación están permitiendo que en 2022 el coste del stock total de deuda se sitúe en el 1,64%, nivel similar al de cierre de 2021. Por su parte, la vida media de la deuda del Estado en circulación se sitúa en 7,9 años.
BBVA, Banco Santander, Crédit Agricole, Deutsche Bank, JPMorgan y Société Générale han actuado como directores de esta emisión. El resto del grupo de Creadores de Mercado de Bonos y Obligaciones del Estado han actuado como codirectores.