La selección española de fútbol masculino ha cerrado la fase de grupos de los Juegos Olímpicos de París 2024 con un sabor agridulce, tras perder 2-1 contra Egipto en el Estadio de Burdeos. A pesar de la derrota, el equipo dirigido por Santi Denia avanza a los cuartos de final como segundo del grupo C, donde se enfrentará probablemente a Japón, una vez se cierre la clasificación del grupo D.
El partido comenzó con España buscando el control, pero fue Egipto quien demostró una mayor eficacia en sus jugadas a la contra. El primer gol egipcio llegó gracias a un remate de Ibrahim Adel desde fuera del área. El segundo tanto de Egipto fue producto de un error defensivo de España, cuando un mal pase de Pacheco permitió a Adel marcar de nuevo.
España tuvo sus momentos, especialmente en los primeros minutos, con remates de Pacheco y Camello que no lograron concretar. La ocasión más clara del primer tiempo fue un tiro de Marc Pubill que se estrelló contra el palo derecho de la portería egipcia. Iturbe, el portero español, tuvo que intervenir con una parada acrobática para evitar el segundo gol egipcio antes de que Adel finalmente batiera a Iturbe al final de la primera mitad.
En el segundo tiempo, Denia realizó varios cambios estratégicos, introduciendo a Sergio Gómez y Juanlu Sánchez, entre otros, para intentar cambiar el rumbo del partido. España comenzó a presionar y generó algunas oportunidades, incluyendo un remate de Camello que se fue al palo. Sin embargo, Egipto mantuvo el control y estuvo cerca de aumentar su ventaja con varios intentos desde fuera del área.
El gol de la esperanza para España llegó en el minuto 90, cuando Samu Omorodion remató de cabeza para reducir la diferencia. A pesar de añadir 10 minutos de descuento, España no logró encontrar el segundo gol que le permitiera igualar el marcador. La selección egipcia aprovechó el impulso final de España para acercarse a un tercer gol, pero el resultado final fue un 2-1 en contra.
El equipo español se prepara ahora para los cuartos de final, donde se medirá con un rival aún por confirmar. La derrota ante Egipto, aunque decepcionante, no impide que España siga en la competición olímpica con la esperanza de alcanzar las medallas.