La Guardia Civil de Granada ha protagonizado un rescate angustioso tras recibir una denuncia sobre la presencia ilegal de dos macacos de Gibraltar en el patio de una vivienda. El propietario, un hombre de 56 años, está siendo investigado por delitos contra la fauna y flora silvestres, así como por maltrato animal continuado.
El Equipo de Protección a la Naturaleza (EPRONA) de la Comandancia de Granada inició una investigación inmediata luego de recibir la alerta ciudadana. Los agentes confirmaron la presencia de dos macaca sylvanus, especie protegida en el Apéndice I del Convenio CITES, lo cual prohíbe su posesión por particulares.
Las condiciones en las que se encontraban los primates eran alarmantes según los informes de los veterinarios de la Fundación AAP PRIMADOMUS, quienes acompañaron a la Guardia Civil en el operativo. Los monos estaban encerrados en jaulas oxidadas con salientes punzantes, sin acceso regular a agua y en condiciones higiénicas muy precarias. Además, presentaban signos severos de malnutrición prolongada y enfermedades derivadas, incluyendo alopecia y problemas dentales graves.
La situación sanitaria también era preocupante, ya que los macacos pueden transmitir enfermedades graves como tuberculosis y herpesvirus a los humanos, especialmente cuando se mantienen sin supervisión veterinaria durante años, como en este caso.
La Guardia Civil procedió a la incautación de los animales, quienes ahora están bajo el cuidado y rehabilitación de la Fundación AAP PRIMADOMUS, especializada en mamíferos exóticos. Mientras tanto, los macacos están a disposición del juzgado correspondiente para determinar las acciones legales pertinentes contra el propietario.
Este rescate subraya la importancia de respetar las regulaciones de protección animal y la necesidad de una supervisión adecuada para prevenir el maltrato y el comercio ilegal de especies protegidas.