Una operación conjunta entre la Guardia Civil, la Agencia Tributaria, la Garda de Irlanda, la @ON italiana y Europol ha culminado con el desmantelamiento de una red internacional de tráfico de drogas que operaba desde España y enviaba grandes cantidades de estupefacientes a Irlanda. La investigación, denominada «Pereira», se ha saldado con la detención de 20 personas y la incautación de más de 200 kg de marihuana y 300 kg de cocaína.
La organización criminal tenía su base de operaciones en una nave industrial en Castellón de la Plana, donde almacenaban y empaquetaban la droga en envases al vacío. Posteriormente, utilizaban sofisticados dobles fondos en turismos, camiones y semirremolques para el transporte de la mercancía ilícita hasta Irlanda. El destino final era Dublín, donde contaban con una segunda sede que recibía los envíos.
El grupo delictivo operaba con un alto nivel de seguridad, empleando diferentes métodos para evitar la detección por parte de las autoridades. Sus miembros estaban altamente especializados y contaban con recursos económicos significativos que les permitían expandir su red y garantizar la colaboración de terceros en sus actividades ilícitas.
Durante la operación, que se desarrolló en coordinación con las autoridades irlandesas e italianas, se realizaron cinco registros en Castellón de la Plana, Orihuela y Dublín. En ellos, se incautaron 12 vehículos, incluidos camiones de gran tonelaje, 35.000 euros en efectivo, una pistola con munición, cuatro ordenadores y 35 teléfonos móviles. También se confiscaron documentos clave para la investigación y pruebas que vinculan a los detenidos con el tráfico de drogas, el blanqueo de capitales y la tenencia ilícita de armas.
Entre los arrestados se encuentra un ciudadano irlandés considerado el líder de la red en su país, además de individuos de nacionalidad española, colombiana e irlandesa con edades comprendidas entre los 30 y los 50 años. Todos ellos enfrentan cargos por pertenencia a organización criminal, tráfico de drogas, blanqueo de capitales y tenencia ilícita de armas.
La desarticulación de esta organización supone un golpe significativo al tráfico internacional de drogas entre España e Irlanda. La investigación sigue abierta y no se descartan nuevas detenciones en los próximos días.
