En una impresionante demostración de cooperación internacional, la Policía Nacional de España, junto con agencias de once países, ha desmantelado la mayor organización de «narcoveleros» conocida hasta la fecha. Esta operación ha culminado con la detención de 50 personas y la realización de 47 registros en diversas localizaciones, incluyendo Málaga, Valencia, Almería, Alicante, Girona, Murcia en España y extendiéndose a Noruega, Bulgaria, Reino Unido, Panamá, Trinidad y Tobago, Portugal y Colombia.
La operación, denominada «Operación Vela», comenzó tras detectar a una organización británica con base en España, que facilitaba rutas de narcotráfico desde Sudamérica hacia Europa. La organización disponía de un arsenal de embarcaciones registradas a nombre de terceros para esconder sus actividades ilícitas y contaba con la colaboración de diversos cárteles sudamericanos para la producción y transporte de la droga.
Durante los registros se incautaron 1.500 kilos de cocaína, ocho embarcaciones y 36 vehículos, además de más de 85 terminales telefónicos utilizados para coordinar las operaciones. Las investigaciones revelaron que la organización había estado operando durante más de 20 años, dirigida por un líder apodado «el profesor», quien había establecido una red compleja y eficiente que abarcaba varios continentes.
El liderazgo y la infraestructura logística de la red estaban centrados en España, desde donde se coordinaban las rutas marítimas hacia las Américas. Los puntos logísticos incluían puertos en Valencia, Alicante, Almería, Málaga y las Islas Canarias, con enlaces en Sudamérica en países como Brasil, Colombia, Guayana, y varios otros.
La importancia de esta operación radica no solo en la magnitud de las detenciones y las incautaciones, sino también en el golpe estratégico asestado a la logística del narcotráfico marítimo entre continentes. La operación fue apoyada por EUROPOL y contó con la participación de la NCIS de Noruega, la DEA estadounidense, la NCA británica, y el MAOC europeo, demostrando un ejemplo exitoso de colaboración internacional contra el crimen organizado.
La investigación continúa abierta, y no se descarta que surjan más detenciones a medida que avance la instrucción del caso, dirigida por el Juzgado de Instrucción 4 de Arrecife y el Ministerio Fiscal. Esta operación marca un hito en la lucha contra el narcotráfico y refuerza la necesidad de cooperación internacional para combatir eficazmente este tipo de delincuencia organizada.