Tellado critica a Yolanda Díaz por su complicidad en la corrupción del Gobierno de Sánchez

En la sesión de control al Gobierno en el Congreso, el portavoz del GPP, Miguel Tellado, interroga a Yolanda Díaz sobre su complicidad con la corrupción y los problemas que enfrenta la gestión de Pedro Sánchez.

Tellado critica a Yolanda Díaz por su complicidad en la corrupción del Gobierno de Sánchez

En la última sesión de control al Gobierno celebrada en el Pleno del Congreso, el portavoz del Grupo Parlamentario Popular (GPP), Miguel Tellado, lanzó duras críticas a la vicepresidenta Yolanda Díaz, cuestionando su lealtad a un Gobierno marcado por la corrupción. Tellado se dirigió a Díaz, planteándole si realmente compensa ser parte de un Ejecutivo liderado por Pedro Sánchez, quien enfrenta múltiples investigaciones por delitos como tráfico de influencias, prevaricación, malversación y fraude fiscal.

Tellado no escatimó en palabras al afirmar que la vicepresidenta se ha convertido en cómplice de la corrupción al aceptar su posición en el Consejo de Ministros. «Sánchez ha comprado su integridad con una silla en el Consejo de Ministros y su silencio con un coche oficial», sentenció. El portavoz del GPP instó a Díaz a reflexionar sobre su papel en un Gobierno que, según él, intenta silenciar a los medios críticos y legislar sin la debida transparencia ante el Congreso.

Además, durante su intervención, Tellado destacó que la situación actual es una de las razones por las que el partido Sumar enfrenta un declive en las encuestas. «¿Va a seguir defendiendo la corrupción de sus socios?», preguntó, resaltando que la falta de una postura firme contra la corrupción está minando la credibilidad de Sumar y su liderazgo.

En un tono directo, Tellado se dirigió también a la ministra de Hacienda, María Jesús Montero, sobre la retirada del Gobierno de la senda de estabilidad fiscal a solo dos días de su votación. «Venga llorada de casa y ocúpese de los problemas de España en lugar de los del presidente ausente», exigió, demandando una gestión más eficaz que priorice los intereses del país sobre los de Sánchez.

La sesión de control al Gobierno se convirtió en un espacio para el debate sobre la ética y la responsabilidad política, poniendo de relieve las tensiones entre los partidos y la necesidad de una mayor transparencia y rendición de cuentas en el Ejecutivo actual.

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