
Una fuerte explosión de gas ha provocado el derrumbe de un edificio de viviendas en la calle Ramón y Cajal, en el municipio asturiano de Mieres, dejando un saldo de 17 personas heridas. Tres de ellas se encuentran en estado grave, mientras que otras dos son menores de edad. A pesar de la magnitud del siniestro, las autoridades municipales han confirmado que no se han registrado víctimas mortales.
La Unidad Canina de Rescate trabaja en el lugar con la esperanza de encontrar con vida a una persona que podría estar atrapada bajo los escombros. Sin embargo, los equipos de rescate están enfrentando dificultades debido a la inestabilidad de la estructura. Por esta razón, los bomberos han solicitado la movilización de maquinaria pesada para acelerar la remoción de escombros y ampliar la búsqueda.
El suceso ocurrió alrededor de las 16:00 horas, cuando vecinos alertaron al Centro de Coordinación de Emergencias del 112 Asturias sobre una fuerte explosión. Según testigos, el estruendo se escuchó en todo el municipio y la onda expansiva afectó a varios edificios cercanos, dañando balcones y fachadas. Las llamas llegaron incluso a una edificación contigua, lo que generó mayor preocupación entre los residentes.
Según informaciones preliminares, las causas de la explosión están siendo investigadas. No obstante, algunos vecinos han señalado que, desde primera hora de la mañana, varios operarios trabajaban en una arqueta en la vía pública, lo que ha generado incertidumbre en la comunidad sobre una posible relación con el siniestro.
Los equipos médicos desplegados en la zona han atendido a seis mujeres y once hombres. Diez de los heridos fueron trasladados al Hospital Álvarez Buylla, mientras que otros dos fueron derivados al Hospital Valle del Nalón. Nueve de los afectados acudieron por sus propios medios a los centros de salud, y dos personas fueron dadas de alta en el lugar tras ser atendidas por los servicios de emergencia.
Las autoridades han reforzado el operativo de seguridad en la zona, instando a los vecinos a permanecer en sus hogares y a no acercarse a la zona afectada. «Métanse en casa, cierren las ventanas, bajen las persianas y no salgan ni se asomen», repiten los agentes de seguridad para evitar riesgos adicionales.
En el operativo trabajan efectivos de Bomberos del Servicio de Emergencias del Principado de Asturias (SEPA) de los parques de Mieres y La Morgal, junto con la Unidad Canina de Rescate y el Grupo de Rescate. También se han desplegado unidades de los Tedax, encargadas de evaluar posibles riesgos adicionales.
El alcalde de Mieres, Manuel Ángel Álvarez, y la consejera de Salud, Concepción Saavedra, se han desplazado hasta el lugar para coordinar las labores de emergencia y prestar apoyo a los afectados.
Las próximas horas serán clave para determinar el origen exacto de la explosión y descartar la presencia de más víctimas en el lugar del siniestro.